Carta a Venezuela
Venezuela: bella, como su gente. Rincones donde encontrar corazones. Belleza pura, encanto sin igual, todo te embruja.
El país de las arepas rellenas de dulzura, cachapas de amabilidad y patacón aderezado con simpatía.
A Venezuela se la podría comparar con la comida sin sal: simplemente no es nada sin su gente; acogedora, servicial y siempre pendiente de que estés a gusto en su país. Y de que pruebes esto y aquello y de que vayas a tal sitio, a tal otro…
País donde la creación dejó su huella en sus hermosos lagos y afrodisíacos paisajes llenos de palmeras. Del que me enamoré y en el que me volví a enamorar.
Tierra de artesanos, de creadores. Lugar de divertidos maracuchos, amables merideños, entrañables wayú y sabios yanomami.
Cada reunión es una fiesta donde se comparte lo mejor de cada uno y se disfruta del mero hecho de vivir.
Un país en el que tuve que aprender a decir “pana” en vez de “tío”, “buseta” en vez de “autobús”, “provocar” en vez de “apetecer”, “verga” en vez de “hostia” o “coño” y… de la palabra “coger”, ¡olvídate! Si es que… ¡En España cogemos de tó!
Y es que las diferencias de un idioma que se antoja ser único pero no lo es causa situaciones cuanto menos curiosas. Aunque intuía que no era lo que me querían decir, me asusté cuando me dijeron que me iban a dar la cola. Ahora, ¿quién es el depravado? Puede que los españoles cojamos todo, vale, lo admito, pero, ¡los venezolanos le dan la cola a cualquiera!
Para estar claros, dar la cola en Venezuela significa llevar a alguien en coche. Lo que sería en España «te acerco con el coche». Y allí la cola es el culo. De ahí la canción de «mueve la colita mamita rica, mueve la colita, ta, ta, ta» (y ahora ya sabes que la mujer de la canción no tenía pene…)
Sin embargo, dar la cola en España, queridos venezolanos, es agarrar una parte del hombre en fin… que está ahí abajo. ¡¿Qué divertido es el español, no?!
Terminaré mi escrito con una poesía que leí y con la que me sentí, en parte, identificada.
No importa dónde has nacido; lo que realmente importa es dónde has crecido, dónde has llorado, dónde has reído, dónde has amado y dónde has sufrido. Yo lloré mucho en Venezuela. Reí mucho también, ¡Sí que reí! Amé mucho -aún de lejos, sigo amando-… y es que a las faldas del Ávila crecí.
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Qué bueno y divertido. Un post romántico y cachondo a la vez. Y con esas fotos de playas, me dan ganas de salir a conocer Venezuela ahora mismo. Un abrazo de la cosmopolilla.
Es que Venezuela es así, romántica y cachonda a la vez =) ¡Tienes que ir para vivirlo! Las playas son de lo mejor… aunque el Salto del Ángel sigue en mi lista, ¡habrá que ir de nuevo! ¡Un besooo!
Qué bien escribes y qué gusto da leerte. El texto se me hizo corto y me quedé con ganas de más. Venezuela tiene muchas cosas buenas y bonitas, pero es una lástima que no la hayan sabido querer como se merece. Tuve la suerte de conocerla casi toda y tiene paisajes espectaculares y únicos. Y la gente es tal cual como la describes, en su mayoría, pero ir allí es casi una ruleta rusa. Ojalá cambie para bien pronto y que todos puedan conocer sus maravillas.
¡Gracias! Seguiré escribiendo más sobre Venezuela, es que se me acumulan las tareas =) Pues sí, ojalá cambie pronto y todo el mundo pueda disfrutar de sus paisajes y de su gente (la de verdad, no la que manda y les apoya).
¡Un besoooo!
que buen post Alba saludos desde Venezuela me alegra mucho que la disfrutaras y espero puedas volver para seguir conociéndola ya que nunca te deja de sorprender yo que vivo aquí te lo puedo confirmar siempre hay un lugar nuevo que te deja enamorado y aunque atravesemos muchos problemas en este momento pero la mayoría de los venezolanos están trabajando y con muchas esperanzas para que todos puedan venir y disfrutar sin ningún problema 😀
¡Hola, Nómadas!
Gracias por vuestras palabras, yo espero volver por tercera vez a Venezuela y seguir disfrutando de ella y descubriendo rincones nuevos. También deseo que pronto se estabilice la situación y más gente pueda disfrutar de ese bello país.
¡Un saludo!
Soy venezolana y ahora que he migrado me he dado cuenta que de verdad los venezolanos somos unicos y nuestra cultura tambien.. pero es una situacion compleja.. Venezuela es o fue muy rica atrajo muchisimos extranjeros que hicieron vida en ella, y esa mezcla de cultura es la causante de nuestra manera de ser.. en estos paises he escuchado de xenofobia y lo he visto y pienso ojalá estos pueblos supieran lo rico que es recibir migrantes y el crecimiento cultural que eso le da a un pueblo… Es como abrir una puerta hacia la libertad.. Yo sigo viviendo en latinoamerica pero como Venezolana puedo decir que una de las tantas cosas que extraño mucho de mi pais es comer paella, conejo al salmorejo con papas arrugadas y ese mojito isleño que solo los canarios saben hacer.. jajaj y cada año en las ferias de la candelaria o de las nieves… cualquiera me pregunta y esa gastronomia que tiene que ver con venezuela? Pues mucho tiene que ver.. recuerdo que lloré este año cuando mi papá me envió una foto estando en la feria de la candelaria.. Una vez leí que venezuela era llamada la octava isla canaria por todos los migrantes que hay de allí… Esas costumbres que llevaron los extranjeros a mi pais y es con lo que crecimos, nuestra pasión por comer pasta contagiada de los italianos, las panaderias de los portugueses, los alemanes y su gastronomia en la colonia tovar, yo extraño ver arabes vendiendo sabanas o vendiendo cualquier cosa, los colombianos y peruanos vendiendo ropa etc tantas cosas que solo se ven en vnzla.. Y sobretodo extraño una comunidad donde nadie es diferente, donde todos somo un solo pueblo, todos somos venezolanos, aunque entre mi familia y entre mis amistades abunde la doble nacionalidad, todos somos venezuela, donde habia tanta abundancia y no existia el egoismo. Así escandalosos, alegres, unicos. La venezuela de hoy es el resultado de una gran mezcla, bonita y hermosa, Son los recuerdos que tengo de mi pais…
¡Hola, Scarlet!
Cuánta razón tienen tus palabras. Esa mezcla y diversidad hizo de Venezuela un gran país, un país donde había hueco para todo el mundo. Qué lindo poder compartir y respetar a tantas culturas y a la vez hacerla tuya. Espero que algún día llegue a ser la que fue.
¡Un abrazo fuerte!